La mamá de un reo -- preso en la cárcel del condado Kleberg está preocupada con la manera en que las entidades del lugar están lidiando con los presos que han dado positivo al COVID-19.
La mujer, quien nos pidió no revelar su identidad, dice que su hijo le contó que fue sometido a la prueba de COVID-19 dos días después de que empezó a tener síntomas.
Y que a los reos que han dado positivo al virus, los siguen teniendo en las mismas celdas que los reos no contagiados.
Ellos permiten que las personas contagiadas y las no contagiadas se junten durante el recreo, dijo. Que les dan medicina y los presos no saben qué están tomando.
Hay personas que piden ir al hospital y la enfermera les dice que no.
“Hay dos pods, son pods grandes”, dijo el capitán Albert Castillo de la cárcel. “Uno es para las personas en cuarentena quien fueron expuestos en algún momento. Ellos no tienen síntomas. Ellos dieron negativo. nosotros tenemos otro pod con 12 personas que dieron positivo. Entonces están separados”.
Según funcionarios con la oficina del alguacil del condado Kleberg, el viernes se realizará una ronda de pruebas para su personal y reos.
Los presos tienen la opción de negarse a hacerse la prueba.