NoticiasNoticias locales

Actions

CCAD da bienvenida a su primer capellán en su historia

El Almacen Militar de Corpus Christi está brindado a sus empleados las herramientas necesarias para mejorar su salud y ahora han incorporando los servicios de un capellán para abordar la salud mental.
Posted

CORPUS CHRISTI, Tx — El Almacen Militar de Corpus Christi -- C.C.A.D. por sus siglas en inglés -- está brindado a sus empleados las herramientas necesarias para mejorar su salud y ahora han incorporando los servicios de un capellán para abordar la salud mental.

El capitán Dennis Ohiku, fue bienvenido a la fuerza laboral del Corpus Christi Army Depot en Noviembre de 2023.

Su asignación es parte del programa de mejoría de la salud, implementado para asegurar el bienestar de todo el personal de CCAD, tanto militar como civil y familiares.

"La intención es para mejorar la salud física, espiritual, psicológica y más", dice el Capellán Ohiku. "Yo creo que los empleados tienen que aprovechar este servicio para que ellos puedan llegar a ser empleados muy exitosos".

C.C.A.D. cuenta con una fuerza laboral de miles de personas que realizan una variedad de trabajos, incluyendo mantenimiento, reparación y revisión de helicópteros; además de labores administrativas.

Cada uno de esos trabajos implica una gran responsabilidad.

"La razón por que estoy aquí, es una regla de que donde tienes soldados y sus familias, deberíamos tener un capellán para ayudarles porque ese trabajo a veces es bien díficil", dice Ohiku.

Ohiku, es el primer capellán en la historia del Corpus Christi Army Depot y se incorporó a C.C.A.D. en Noviembre de 2023. Desde entonces ha mantenido una política de puerta abierta.

"No importa su religión, su fé, su denominación. Mi oficina está abierta para todas las personas que trabajan en esta instalación. >

El capitán Ohiku dice que su labor lo hace sentir satisfecho y asegura que servir a sus colegas es su llamado.

"En esta organización entrenamos juntos, luchamos juntos y ganamos juntos", indicó Ohiku.

El capitán Ohiku es de origen africano y me cuenta que aprendió español tras vivir en España donde realizó labores de misionero.