ROCKPORT, Tx — A lo largo de este mes de mayo celebramos la herencia asiático-Americana de las Islas del Pacífico.
Una familia multicultural de Rockport compartió su historia de amor y cómo emigraron desde Filipinas hasta su nuevo hogar, Rockport, Texas.
“No creo en el amor a primera vista, hay que plantarlo y cultivarlo para que crezca”, dijo Marife Darnell.
Eso es lo que se tomó para que la historia de John y Marife Darnell floreciera en amor verdadero.
La historia comenzó cuando John visitó las filipinas para honrar a su padre, quien fue prisionero de guerra en ese país y ahí se topó y se enamoró con Marifé y si hijo de 4 años.
“Cuando regresó a casa hubo una breve comunicación aquí y allá, ya sabes escribiendo cartas como en los tiempos antiguos, llamaba por teléfono los fines de semana y luego, de repente, dejó de hacerlo”, dijo Marife.
11 años después, los dos volvieron a conectar cuando John regresó a la isla en busca de Marife y su hijo.
“Tardó 5 años en restablecer la relación. Se trasladó a filipinas y primero se ganó la confianza de mi hijo y luego la mía. Me lo pidió tres veces antes de que finalmente le dijera que sí para casarme con él,” dijo Marife.
Después de 5 años juntos como familia en filipinas, el marine retirado decidió que había llegado el momento de casarse y trasladar a la familia ha estado unidos.
Era la mejor opción económica ya que su salud empezó a empeorar.
“Su salud empezó a decaer en los últimos tres años muy rápidamente, y ha sido duro”, dijo Marife.
Cuando la pareja se reencontró, su hijo Jed ya tenía 15 años. Él dijo que ve a John como su verdadero padre y que estuvo tan influenciado por él que siguió en sus pasos y también se alistó en los marines.
“Las veces que tuvimos que llevarlo al hospital porque no le bajaba o subía la presión fueron duras. Pero me alegro de que entró en nuestras vidas, porque no solo hizo feliz a mi madre, sino también a mí, que ahora tengo un padre”, dijo Jed Fesarit.
Los Darnell son una familia multicultural que valora la fortaleza y la amabilidad.
Marife y John llevan 8 años casados y dicen que incluso sonríen en los momentos difíciles.