CORPUS CHRISTI, Texas — El 21 de marzo, el Ayuntamiento de Corpus Christi aprobó una resolución para que el administrador municipal empezara a colaborar con el Puerto de Corpus Christi en la búsqueda de una fuente de agua resistente a la sequía. Ese mismo día, los comisionados del puerto aprobaron un memorando de acuerdo similar.
El martes, presentaron su informe de situación al ayuntamiento.
"Creo que la colaboración tiene mérito y realmente puede beneficiar a la ciudad de Corpus Christi, la región, el Puerto de Corpus Christi", dijo el administrador de la ciudad de Corpus Christi Peter Zanoni.
La desalinización del agua es una de las principales soluciones a la sequía.
El puerto está estudiando la posibilidad de desalinizar agua en Harbor Island y el canal de la Quinta. La ciudad está estudiando el puerto interior, el canal de La Quinta y, más recientemente, la central eléctrica de Barney Davis.
Harbor Island es la opción preferida del Puerto y es allí donde ambas entidades han empezado a evaluar. Tras "numerosas" conversaciones, se han realizado visitas en situ a Harbor Island.
"Comenzamos este proceso allá por 2017 por razones que muchos de ustedes conocen", dijo el CEO del Puerto, Sean Strawbridge. "Pensamos que 50 millones de galones al día iban a ser suficientes. Aquí estamos cinco años después y estamos debidamente preocupados de que 50 millones de galones al día no sean suficientes."
Algunas de las cosas que se están discutiendo con el proyecto de Harbor Island son la cantidad de salida y la ubicación de los túneles de entrada y salida. El Puerto ya ha recibido de la Comisión de Calidad Medioambiental de Texas (TCEQ) el permiso para el vertido de la desalinizadora. La Agencia de Protección del Medio Ambiente ha suspendido el permiso porque tiene dudas que deben resolverse.
En cuanto a la logística, Zanoni recomendó un ingeniero al que Strawbridge podría consultar. Así pues, el puerto ha decidido destinar hasta $250,000 dólares a evaluar cómo podría conectarse el emplazamiento de Harbor Island al sistema de distribución de agua de la ciudad.
Las dos entidades no han fijado una ubicación prioritaria, pero las conversaciones se iniciaron en Harbor Island.
Los miembros del Consejo coincidieron en su preocupación por el medio ambiente a la hora de considerar la desalinización. Expresaron su preocupación por el emplazamiento de Harbor Island y el del puerto interior.
"En lo que respecta al puerto interior, hasta que no dispongamos de modelos o justificaciones sobre cómo se disipa la salinidad, es difícil aprobarlo", declaró el concejal Gil Hernández.
Strawbridge intentó tranquilizar al consejo asegurando que el impacto medioambiental sería mínimo en Harbor Island, presentando informes realizados por terceros.
Strawbridge y Zanoni también han empezado a discutir cómo determinar los costes de las tarifas para los clientes y la capacidad que puede ser necesaria.
Ahí es donde realmente creemos que Harbor Island ofrece una oportunidad para el crecimiento, porque está tan cerca del Golfo de México y el tamaño de la propiedad ofrece una escalabilidad que quizás otras ubicaciones que hemos estudiado pueden tener limitada".
Strawbridge anticipó que, si todo va bien, el Puerto tendrá todos los permisos para Harbor Island el año que viene. Una estimación que recibió para la construcción sería de 36 a 40 meses. Por lo tanto, dijo que la desalinización está probablemente a 5 años vista.
La concejala Sylvia Campos intentó presionar para que se sometiera la idea de la desalinización a votación de los votantes. Campos sigue empeñada en buscar otra fuente de agua resistente a la sequía.
"La cuestión es que tenemos que probar todo lo demás antes de intentar la desalinización", dijo. "Y además, también me he dado cuenta de que en su presentación ni siquiera se menciona la conservación".
Zanoni se refirió a la fuente más probable de la que podría obtener agua la ciudad, el Proyecto de Aguas Subterráneas de Evangeline.
"El agua más pronto disponible es probablemente a través de Evangeline Sistema de Aguas Subterráneas y que nos han dicho que es de unos dos años. Pero algunos creen que eso es optimista", dijo.
La comunicación entre la ciudad y el puerto continuará, ya que Zanoni añadió que no se podrán conocer los costes hasta que se haya trabajado mucho más.
Pero hay consenso en que la colaboración será beneficiosa para todos y puede ayudar a conseguir financiación estatal para la desalinización.
"Lo llaman el Préstamo SWIFT, pero en la legislatura se habla de aumentar sustancialmente esa cantidad de fondos, esa disponibilidad de fondos. Y hemos oído decir a nuestros legisladores, tanto locales como de Austin, que esta zona sería la más adecuada para competir por fondos adicionales si colaboramos", afirmó.
La ciudad y el puerto tienen previstas visitas al puerto interior los tres próximos viernes a partir del 21 de abril. Aún no se han fijado las fechas de las visitas al emplazamiento de Barney Davis.
Strawbridge y Zanoni tienen previstas más presentaciones ante el ayuntamiento sobre sus avances.
