COPRUS CHRISTI, Texas — Poco más de un año después del tiroteo en la escuela de Uvalde, los legisladores de Texas se han reunido para aplicar nuevas normas destinadas a mantener la seguridad de los alumnos y el personal de las escuelas y evitar que vuelvan a producirse situaciones similares.
La nueva normativa escolar se llama el proyecto de ley 3, destinada a proteger las escuelas.
A partir del 1 de septiembre, todos los campus estarán obligados a contar con un agente de policía armado.
“Hemos tenido un oficial armado en cada campus durante el último año, los únicos cambios que hemos tenido que hacer son con nuestros campus fuera del sitio donde los estudiantes van a hacer la recuperación de créditos”, dijo el Superintendente Adjunto Juan Sandoval del distrito de Kingsville.
Él dijo que ellos han intentado prepararse para este cambio antes de la fecha de aplicación.
“Queremos asegurarnos de que continuamos con las prácticas que pusimos en marcha el año pasado. Asegurarnos de que nuestros perímetros están sellados, que nuestras puertas permanecen cerradas por fuera, y que tenemos un protocolo para los padres y cualquier visitante que venga al campus asegurándonos de que solo entran por una entrada”
Aparte de exigir un oficial armado en cada escuela, este proyecto de ley proporcionara más dinero para las aulas, aumentaría la remuneración de los profesores,
reduce la recaptación y recorta los impuestos locales sobre la propiedad.
“Además, colocaremos un plástico especial en las ventanas que impedirá la entrada de personas a través de nuestras ventanas y puertas más rápidas”, dijo Sandoval.
El superintendente adjunto Sandoval quiere que todos los padres, estudiantes y personal del distrito escolar de Kingsville sepan que están trabajando duro para mantener a todos a salvo este año escolar y espera que los distritos escolares de la zona costera estén haciendo lo mismo.